
Las albóndigas son una tradición entre nosotros desde siempre, seguro que recordamos de pequeños a nuestras abuelas y nuestras madres haciéndolas, siempre riquísimas. Es de esos platos en los que, yo por lo menos, me cargo casi una barra de pan
No tiene muchos trucos, quizás y únicamente, conseguir que las bolas de carne sean jugosas y que cuando las tenemos en la boca, no se muestren harinosas ni apelmazadas.
INGREDIENTES
- 500 Gr. de carne de ternera
- 500 Gr. de carne de cerdo
- Una rebanada de pan de molde o miga de pan
- Un poco de leche
- Comino
- Perejil fresco
- 2 Ajos
- 2 Huevos
- Sal
- Pimienta negra
- Queso manchego o parmesano
- 1 Cebolla grande
En un bol mezclamos la rebanada de pan de molde o la miga remojada previamente en leche, la carne de ternera y la carne de cerdo, ajo, un poquito de comino, perejil fresco, dos huevos, sal, pimienta negra y un poco de queso manchego o parmesano.
Ponemos a ponchar una cebolla grande, un pimiento y un par de ajos, con unas ramitas de tomillo.
Cuando esté todo blandito le echamos un vaso de vino blanco y cuando haya evaporado el alcohol, una cucharadita de pimentón de la vera que deberemos de remover rápido para que no se queme. Después echamos una cucharada de harina y la cocemos durante dos minutos.
Moldeamos las albóndigas, las rebozamos con harina y a freír un poquito con aceite de oliva virgen extra. 1’ por cada lado.
Le echamos dos o tres vasos de agua o caldo y dejamos cocer durante 10’, trituramos todo y echamos un poco de perejil picado. la diferencia de utilizar agua o caldo, es si os gusta mas o menos fuerte.
Incorporamos las albóndigas que tendremos a un fuego suave durante 20’. Les vamos dando la vuelta de vez en cuando.
Este plato me ha salido por 2,25 €. /persona (4personas).

